Reformar un piso siempre empieza igual: ilusión, un montón de ideas guardadas en el móvil y la sensación de que por fin vas a tener la casa que llevas tiempo imaginando.
Pero, también, hay algo que nadie te cuenta…
La cantidad de errores que se cometen al reformar un piso sin darse cuenta. Y no, no hablamos solo de romper un tabique de más. Hablamos de decisiones pequeñas y otras no tan pequeñas que pueden convertir una reforma en un quebradero de cabeza.
Por eso, si estás pensando en renovar tu vivienda o buscas información sobre reformas integrales en Zaragoza, esta guía de los 8 errores más comunes al reformar tu piso y como evitarlos te va a ayudar a aclarar tus ideas.
Empezamos.
1. Empezar sin un plan claro: el error que lo complica todo
Este es un clásico. Empiezas a hablar con una empresa de reformas, te gusta una idea, luego otra… y sin darte cuenta, estás tomando decisiones sobre la marcha.
¿Consecuencia? Cambios constantes, retrasos, más polvo del necesario y, sí, más gastos.
La realidad es que antes de picar la primera pared necesitas un proyecto claro, especialmente si estás planteando una reforma integral completa. Definir distribución, materiales, estilo y prioridades, desde el principio te evita muchos dolores de cabeza.
Consejo práctico: Si no sabes por dónde empezar, una empresa especializada en reformas integrales puede ayudarte a ver claro lo que necesitas y como quedará la reforma.
2. Confiar en instalaciones antiguas porque “parecen estar bien”
Ojalá las instalaciones duraran toda la vida, pero cuando entras en un piso que ya tiene unos cuantos años encima, lo normal es que electricidad, fontanería o gas estén pidiendo un cambio urgente.
Muchos propietarios quieren “aprovechar” lo que ya hay.
Pero, si la instalación tiene más de 20 años, la probabilidad de que dé problemas a corto plazo es altísima.
¿Y sabes qué es lo peor?
Que si falla algo dentro de dos años, tendrás que volver a romper paredes… otra vez.
Renueva todo lo que no se ve a simple vista y asegúrate de que los profesionales entregan boletines y certificados.
3. Mala elección de los materiales
Cuando estás comparando opciones y presupuestos, es normal fijarse en el precio. Pero cuidado: lo barato suele salir caro.
- Un suelo laminado demasiado económico puede hincharse.
- Un mueble de cocina barato no resiste la humedad.
- Una pintura básica pierde color en meses.
No hace falta irse a lo más caro, pero sí elegir materiales de buena calidad y durabilidad, sobre todo en zonas como la cocina, donde hacemos mucho uso diario y la familia suele pasar gran parte del tiempo.
Esto hará que puedas disfrutar de la reforma mucho más tiempo.
4. Empezar la reforma sin permisos… y cruzar los dedos
No pedir permisos es más común de lo que imaginas. La mayoría de las personas piensan que no pasa nada… hasta que pasa.
Dependiendo de lo que quieras reformar, es posible que necesites una licencia de obra menor, mayor o una comunicación previa. Y si lo haces sin permiso, podrías enfrentarte a:
- Multas
- Paralización de obra
- Problemas con vecinos o la comunidad
En Vértice Estudio gestionamos todos los trámites de las reformas en Zaragoza y provincia de nuestros clientes.
5. Dejar que el precio sea el único criterio para contratar la reforma
Elegir la opción más barata, no es siempre la mejor opción, a veces acaba saliendo caro.
Si una empresa no te da contrato, no te detalla las partidas, plazos o no muestra trabajos anteriores… cuidado.
Lo ideal es confiar en un equipo que trabaje con transparencia, que enseñe proyectos previos y que te dé una planificación realista. Una reforma es algo serio: mejor hacerlo bien desde el principio.
Si quieres ir sobre seguro, en Vértice Estudio te ofrecemos un servicio llave en mano donde todos los gremios trabajan coordinados, te ofrecemos asesoramiento desde el principio y nos ocupamos de todos los trámites.
6. Subestimar el tiempo que necesita una reforma
Todos hemos escuchado eso de “esto lo tienes en cuatro semanas”.
Pero una reforma integral rara vez es así.
Materiales que tardan en llegar, imprevistos en viviendas antiguas, trabajos que dependen de otros… Todo influye.
No significa que la reforma vaya mal, simplemente que hay procesos que llevan su tiempo.
Consejo: pide un planning de obra y deja siempre un margen adicional.
7. Pensar en la estética y olvidarse de la funcionalidad
Paredes lisas, tonos neutros, tarimas bonitas… todo eso está genial.
Pero si después no tienes suficiente almacenamiento, puntos de luz o funcionalidad, puede que la reforma te quede “bonita pero incómoda”.
La distribución, la luz, la ergonomía y los muebles son parte fundamental del proyecto. Aquí es donde contar con un técnico especializado en decoración de interiores marca muchísimo la diferencia.
8. No controlar el presupuesto durante la reforma
Otro error habitual es ir aceptando cambios sin revisar cómo afectan al coste final. Los famosos ya que estamos…
- movemos esta puerta.
- tiramos también esta pared.
- ponemos otro tipo de suelo…
Si no se controla, ese “ya que estamos” puede duplicar el coste.
Entonces… ¿Cómo evitar todos estos errores?
Muy sencillo: rodearte de profesionales que realmente sepan lo que hacen y que te acompañen desde el primer día.
Pide que cualquier cambio se comunique antes y por escrito. Y solo avanza si lo tienes claro.
Una buena planificación, un proyecto bien definido y una ejecución cuidada son la clave para que tu reforma salga como esperas.
En Vértice Estudio te asesoramos y planificamos contigo tu reforma paso a paso para darte una orientación clara según el tipo de vivienda.
¿Quieres conseguir el hogar de tus sueños?
Desde cada arista del vértice trabajamos juntos para que tu reforma tome forma y se convierta en el hogar que imaginas. Escríbenos y empezamos.